Alan Mathison Turing, inglés, nacido el 23 de junio de 1912, se suicidó a los 41 años, el 7 de junio de 1954 comiendo una manzana envenenada con cianuro, y esta es la explicación del por qué las computadoras Apple llevan por logo a una manzana mordida.

Informático teórico, matemático, profesor universitario, criptógrafo, lógico, filósofo e investigador de la inteligencia artificial, miembro de la Royal Society, oficial de la Orden del Imperio británico, y maratonista. Escribió: Computing machinery and intelligence - Problema de la parada - Enigma - Test de Turing - La máquina de Turing [tesis de Church-Turing, 1936]. Trabajó para la Universidad de Cambridge, el Laboratorio Nacional de Física, y la Universidad de Mánchester. Pero pasó a la historia por ganarle prácticamente solo la guerra a la poderosa inteligencia nazi al romper sus códigos secretos encriptados gracias a la genial máquina polaca "Enigma" modificada para la máquina de guerra alemana hitleriana, creando a la primera computadora cuando fue el director de la sección Naval "Enigma" de Bletchley Park, un trabajo pionero que liquidó las posibilidades de triunfo nazi en el frente occidental. Tras la guerra, diseñó uno de los primeros computadores electrónicos programables digitales en el Laboratorio Nacional de Física del Reino Unido y poco después construyó otra computadora en la Universidad de Mánchester ["a mano", pieza por pieza, el hardware más el software, y no como ahora en donde cualquiera puede armarse una computadora porque sus piezas se producen industrialmente en serie, y al software se lo compra, piratea, o baja gratis de Internet].

La carrera de Turing finalizó y su genio descomunal se apagó durante la guerra fría al ser condenado por homosexualidad en 1952, y ser obligado a recibir un tratamiento de estrógeno. Dos años después se suicidó, y recién en el año 2013, la reina Isabel II promulgó el edicto por el que se lo exoneró oficialmente, anulándose los cargos. [Nota: en el año 2018 con las pruebas presentadas nadie podría afirmar que fue un suicidio, y yo me inclino a sospechar por un homicidio ejecutado por los rusos].

Dos décadas después de la muerte de Turing, de intentar revertir homosexuales, se pasó a intentar hacer mujeres, tal fue el caso conocido como el "experimento más cruel en la historia de la psicología".

El niño canadiense David Reimer que fue castrado accidentalmente durante una circuncisión a los 8 meses de edad y, ante la imposibilidad técnica en los setentas para la reconstrucción peneana, sus padres decidieron hacerlo pasar por un tratamiento experimental de reasignación de género [remoción de testículos, creación de un conducto vaginal, aplicaciones de estrógenos] por sugerencia del Dr. John Money [Baltimore, U.S.A.] cuya teoría defendía la inexistencia de una sexualidad innata, por consiguiente era posible cambiar la sexualidad del niño a través de una terapia de reorientación, sobre la base de sus ideas sobre la superioridad de la influencia ambiental con respecto a la biológica, de la corriente ambientalista de la psicología en ese momento "de moda". Money estaba convencido de que la educación determinaba la conducta de las personas y aprovechó una oportunidad inigualable para experimentar con David, y otro voluntario perfecto para el control: Brian, su hermano gemelo no castrado. Money expuso el caso como un éxito, pero, la infancia y adolescencia de David fue de terror. Las consultas con John Money para que su desarrollo fuera supervisado mediante simulaciones de juegos sexuales, les trajo trastornos a ambos hermanos. En especial fueron contundentes los cambios al llegar la adolescencia, exacerbando sus evidentes proporciones masculinas pese a que le habían extirpado los testículos y le suministraban estrógeno. Finalmente después de años de ser criado como niña, sus padres tuvieron que decirle la verdad sobre lo que le habían hecho, y a partir de allí David hizo todo lo posible por volver a ser hombre, y volvió a cambiar de sexo: se inyectó testosterona, se realizó una mastectomía doble y dos operaciones de faloplastía. David incluso se casó con Jane Fontaine y se convirtió en padrastro de tres hijos, pero, al poco tiempo su historia se hizo pública y terminó por perder su empleo y a su mujer. Poco después su hermano Brian se suicidó con una sobredosis de antidepresivos y, el 5 de mayo de 2004, a los 38 años de edad, David se voló la cabeza de un escopetazo.

El cuento de ciencia ficción "Esto o nada" de Alfred Bester terminaba así: "Debes vivir tu propia vida, y morir tu propia muerte, sino... morirás la de otro".

Un gobierno queriendo hacer que una de sus más brillantes mentes, y héroe de guerra, sea heterosexual contra su naturaleza. Un psicólogo experimentando con niños. El sector extrovertido de la comunidad gay queriendo forzar a los gays que llevan una doble vida a ser lo que no son. Hombres autoconvencidos de ser mujeres entrando voluntariamente a los quirófanos para ser mutilados, y tal vez hayan más variantes, pero, para todos ellos hay un solo factor común: el suicidio.

Finalmente, tanto el gobierno que obviamente orientado por los descubrimientos de sus científicos sobre la importancia de la testoterona durante la gestación, ordenó que le inyecten estrógeno sintético a Turing para castrarlo químicamente, como los padres orientados por un supuesto hombre ciencia que se creyó sus propias teorías edificadas sobre las ideas de varios farsantes como Reich, Kinsey, Mead, etc., entre ambos demostraron estar equivocados.

¿ Qué nos dice la ciencia del siglo XXI ?: Pues no lo sabemos y ahora con la ciencia constantemente bajo la mira LGBT, nadie parece dispuesto a jugarse por una opinión que va a recibir críticas de las feministas, o de los gays, o de la iglesia. Por ahora sabemos por las ciencias sociales que estadísticamente un gran número de homosexuales fueron abusados sexualmente en la infancia [los informes no lo dicen, así que lo agrego yo: están obviando algo lógico, como que el 100% de los abusadores son homosexuales].

La biología-ciencia no tiene dudas: cromosomas XY para varones, y XX para mujeres, mientras que a la biología-naturaleza no le importa con quienes estos prefieran compartir sus orgasmos, porque como sea que se los vista, la mujer es la única que puede quedar embarazada, y el hombre es el único que puede fecundarla.
Y la biología-ciencia también nos dice que la gestación humana recurre a la ley del menor esfuerzo, y no tiene un diseño para hombres y otro para mujeres, sino un solo diseño, y ese es el más complejo diseño femenino, y el programa codificado en el ADN comienza a desarrollar una mujer, y sólo cuando avanzando en las intrucciones genéticas lee que hay una "Y", empieza a producir cantidades enormes de testosterona que van a atrofiar a algunas partes del cuerpo femenino que se estaba desarrollando, a algunas otras las va a modificar como los ovarios que bajarán y se convertirán en testículos, y a otras partes las va a potenciar, como los huesos, los músculos... y el cerebro [lo que parece que todo el mundo científico tiene miedo de decir].

Una explicación bastante lógica es una falla en el gen Xq28 [en un principio identificado como X2829] que se recibe de la madre y que bloquea el suministro de la testosterona necesaria para masculinizar a una mujer, y que por ser del cerebro la parte más compleja del cuerpo humano [y de mayor tamaño en los recién nacidos], esa falta deja un cerebro femenino con instintos reproductivos femeninos adentro de un cuerpo completamente masculinizado. Pero, como dijo Aldous Huxley: "Una bella teoría puede ser arruinada por un solo dato pequeño y feo", y para la teoría del gen Xq28 el problema es que no explica el por qué de la existencia de las lesbianas [en un porcentaje ínfimo comparado con los homosexuales, pero existen, y ellas se encargan de hacerse bien visibles], porque una niña es un niño que no recibió testosterona, y no al revés, o sea: un niño no es una niña que no recibió estrógeno.

Yo creo que una excepción no la invalida aunque todavía no hayan encontrado al gen complementario del Xq28 que explicaría por qué la mayoría de las lesbianas tienen aspectos masculinos debido a haber recibido más testosterona de la necesaria durante la gestación, aunque el problema obviamente persista con una minoría dentro de una minoría, representada por las lesbianas con características físicas femeninas promedio: Suavidad en los rasgos faciales, una cabellera saludable, pestañas más abundantes, por el contrario: ausencia de barba, mandíbulas delicadas, desarrollo de las mamas en la adolescencia, baja estatura, manos y piés pequeños, hombros estrechos, una pronunciada diferencia en los diámetros de la cintura y las caderas, una capa de grasa debajo de toda su piel, grandes depósitos de grasa en muslos y glúteos, menor sudoración que la masculina, menor musculación, menor cráneo, cuello más largo y fino, voz más suave, mejor vista en la oscuridad y mayor percepción de colores, pero peor percepción de movimiento sumado a una escasa habilidad para el cálculo de trayectorias [traducción: no son buenas arrojando objetos y hacerlos dar en "el blanco"]. La mujer estandard tiene mayor memoria, pero menor capacidad para el pensamiento abstracto, con un mayor vocabulario desde muy temprana edad, acompañado de un mayor uso del lenguaje gestual. También tiene una mayor capacidad y expresividad para las emociones y la empatía, pero contradictoriamente es muy competitiva, territorial, y como tiene alta autoestima, eso deviene en una mala predisposición para el trabajo en equipo con dificultad para crear amistades fuertes [los primeros homo sapiens desarrollaron esta característica porque cazaban en grupo y se protegían mutuamente]. Finalmente, la mujer estandard tiene menor sentido de orientación [suele confundir derecha con izquierda], menor percepción del paso del tiempo, menor sentido del humor, y menor variedad estadística, o sea: hay hombres muy brutos y muy inteligentes, muy bajos y muy altos, muy delgados y muy obesos, muy buenos y muy malvados, en cambio las mujeres con todas sus diferencias, en todos los rubros nunca están muy lejos del promedio, y eso explica por qué alcanza apenas con algo superficial como un buen maquillaje, para que una mujer fea se vea linda, mientras que a un hombre feo no hay forma de arreglarlo y, si se lo intenta, el resultado será hacerlo parecer un puto feo.

En última instancia, la ciencia puede decir lo que dice siempre, pero no que "es un virus" como dicen los médicos cuando están desorientados, sino la respuesta "B": la homosexualidad es multicausal genético, hormonal, mental, psicológico, cultural, ¡ hasta por causas económicas similares a las de la prostitución !, aunque está claro que no hay ni hubo nunca una cultura que no haya sido sino heterosexual con más o menos permisividad y tolerancia, o repudio y desaprobación con las diferentes peculiaridades de las inclinaciones sexuales de algunas de sus minorías.