1] Introducción: Si los semáforos coordinan el movimiento de millones de personas por día, un programa de computación puede hacerlo con todas las diferentes elecciones del país.
Hoy ya es innecesario y costoso tener a todo el Ministerio del Interior más la Justicia Electoral trabajando en algo que pueden hacer mejor unas pocas computadoras que ya están amortizadas, y todo el sistema puede cambiarse por un "Departamento de Estado Virtual", un organismo de gobierno que sólo existirá en el ciber-espacio donde además de información, los ciudadanos puedan:
[A] Inscribirse, presentar curriculums, y dar los exámenes para los concursos que seleccionen funcionarios.
[B] Inscribirse para integrar los tribunales de ética de los Departamentos de Estado, o para los jurados que necesite la Justicia.
[C] Notificarse y sumar su firma a los proyectos de iniciativa popular y a los pedidos de revocatoria de mandatos.
[D] Votar en todo tipo de elecciones y plebiscitos.
[E] Manifestar que se ha equivocado al votar, y de superar al 50% de "descontento" entre sus votantes, revocar el mandato concedido.

Creo que la gente vota mal, porque durante las campañas electorales les dan información apenas válida para los siguientes seis meses, cuando el mandato dura cuatro años. Si a eso le sumamos los votos comprados "clientelares", los muertos que votan, los vivos que se abstienen, los que votan al "mal menor", y los que después se arrepienten, queda demostrado que la ley Saenz Peña del año 1910 con todos los agregados posteriores, fue sin dudas superada por la realidad argentina del siglo XXI, al punto que sinceramente "El Voto Así No Sirve" [EVANS], y el sistema electoral que se describe a continuación es tan perfecto que usted va a poder seguir votando a personas diferentes a las que yo votaría, pero, le va a salir más barato, no hay posibilidad de "robo", y si se equivocó podrá corregir su error en secreto y sin tener que pedir perdón en público.

Como se desarrolla en el tercer tomo de esta obra, no existe una economía comunista, ni socialista, ni heterodoxa, y la única economía que existe es la ortodoxa liberal, incluso en la Unión Soviética después del NEP de Lenin, la economía fue ortodoxa con toques de marxismo, y luego cualquier modelo heterodoxo siempre será, en realidad, ortodoxo con toques heterodoxos [los más utilizados son los trucos keynesianos]. Entonces "EVANS" si nos hacen votar para que los candidatos vencedores puedan experimentar con economías alternaivas. Y peor "EVANS" cuando cualquiera puede comprobar que la economía liberal ortodoxa tiene varios pilares y uno puntualmente referido a este tema está equivocado y nos termina desencadenando el problema irresuelto de la venta de los votos, por lo siguiente: La ortodoxia liberal considera al trabajo como un recurso, y si las necesidades son ilimitadas, entonces no debería haber desempleo, pero, no voy a discutir algo que salta a la vista: el desempeo existe y lo hay desde temporal hasta crónico. El error de los liberales está en desconocer la doble naturaleza del trabajo que es un recurso, pero, también es una necesidad, y por lo tanto hay demanda de trabajo y gente dispuesta a pagar por él, lo extraño está en pagar con dinero para trabajar y conseguir dinero, lo que pocas veces sucede en la forma de "retornos" o colaboraciones con el partido, pero, la mayoría de las veces no se paga con dinero, sino que se paga con una parte de la propia libertad, y a eso se reducen las prácticas clientelistas: hacer que el voto ya no sea libre sino cautivo, por lo que los desocupados les van a pagar a los políticos entregando su voto.

2] Artículo 31 [esbozos previos]: El Sistema Electoral consta de tres partes, los votantes, los candidatos, y los que hacen la elección, trabajo que deberá desempeñar el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos.
Hay cargos que se concursan, otros que se votan, y hay otros que democráticamente se sortearán entre la población.
[A] Cada corporación profesional en la que el Estado delega responsabilidades de alta especialización será un Departamento de Estado autónomo desde que pueda autofinanciarse y elija a la primera serie de sus autoridades, pero a partir de allí, las elecciones internas se "tercerizarán" obligatoriamente, y aunque cada Departamento y cada Municipio se dicten los más complejos reglamentos electorales, con esas instrucciones las elecciones pasarán a ser un deber/servicio del sistema electoral nacional en manos de I.N.D.E.C. debidamente democratizado y neutral una vez desparasitado de toda intromisión política.
El I.N.D.E.C. será ampliado reuniendo a todas las oficinas públicas vinculadas nacionales y provinciales, y como a su vez es un Departamento de Estado, su director será elegido democráticamente, y sólo podrá ser removido por el tribunal de ética interno por inconducta, pero nunca a pedido de otros funcionarios de gobierno que quedan inhabilitados en tanto sean afectados por los resultados de las estadísticas del I.N.D.E.C., sin embargo, ante la manifiesta peculiaridad de ser el único departamento que vota y cuenta sus propios votos, los demás departamentos podrán enviar fiscales a sus elecciones y tribunales de ética.
[B] Para las fechas de elecciones el I.N.D.E.C. entregará turnos respetando el ingreso de los pedidos, excepto cuando las fechas sean determinadas de oficio si el organismo omite, ya sea por error o voluntariamente, hacer el pedido de elecciones para renovar a sus autoridades.
El I.N.D.E.C. publicará con fuerza de ley la caducidad de cada mandato excedido, le bloqueará a los bancos encargados el pago de haberes y de toda partida presupuestaria hasta que asuman las nuevas autoridades.
Las fechas de elecciones serán siempre dentro del último mes de gestión, y las catástrofes naturales, estado de sitio, o las guerras, podrán habilitar sólo a las autoridades del I.N.D.E.C. a cambiar las fechas todo lo necesario.
[C] Los requisitos para votar, ser votados, o sorteados, son los mismos: trabajar o estudiar en el país, obviamente saber leer y escribir en castellano, ser mayores de edad, y no estar inhabilitados por delitos.
Los ciudadanos que residan en el extrerior no perderán nunca la ciudadanía y en determinadas elecciones y plebiscitos podrán votar por vía electrónica conectándose con nuestras embajadas y consulados en el exterior.
Los distintos Departamentos de Estado pueden imponer excepciones, pues por ejemplo el Departamento de Estado de Salud Pública pude ser completamente democrático para designar todos los cargos ejecutivos y legislativos excepto porque por sus leyes internas se decidan por elegir al mismísimo Director del departamento mediante un concurso internacional y, en tiempos de crisis sanitarias, este funcionario será presidenciable aunque no hable castellano.
[D] Los ciudadanos de otros países que trabajen en el país tendrán un régimen especial de permisos si se vota en un día no laboral que para ellos sí es laboral, más el pago del viático. En tanto estén registrados y paguen impuestos, lógicamente tendrán derecho a votar sin perder las habituales remuneraciones que premian al presentismo.
Para que puedan votar los extranjeros que habiten en el país, se les otorgará la ciudadanía automática al adquirir inmuebles, también podrán votar con un recibo de sueldo, o un certificado de estudio, y quienes tras haberse tomado la molestia de venirse hasta aquí desde otro continente a hacer turismo, si es su voluntad y hablan en castellano también podrán votar [obviamente españoles con familia aquí].
[E] En la multidemocracia la elección para integrar el Directorado [ex-gabinete] es votando a un candidato entre una cantidad igual al doble de Departamentos presentados en el comicio. O sea que cada Departamento por elecciones primarias previas, o elegidos por concursos, va a presentarle dos opciones a los electores. Una vez renovado el Directorado, sus miembros definirán quién será el Presidente en un cónclave, y podrán autoconvocarse todas las veces que lo necesiten para cambiar la dirección de la conducción del Estado según sea el problema, crisis, o conflicto que domine la escena política.
Los Departamentos que resuelvan su gerenciamiento por concurso, les ofrecerán a los votantes dos candidatos para elegir. Los Departamentos que resuelvan su gerenciamiento por internas abiertas, les ofrecerán a los votantes la posibilidad de votar varias veces si lo desean, primero, en cualquier elección primaria, y finalmente, en la elección del Directorado.
A diferencia de los Directores de los Departamentos de Estado, las legislaturas municipales y los centros de estudiantes completarán sus bancas democráticamente por sorteos realizados entre todos los ciudadanos habilitados, durando un año en sus cargos [porque se trata de cargas públicas y por eso deben ser breves].
Las elecciones nacionales y municipales se harán por separado y dentro de un mismo cuatrimestre.
Los mandatos duran lo que se decida democráticamente en cada Departamento de Estado, pero, sin superar los cinco años, y alternando gobiernos completos de mujeres con gobiernos completos de hombres, de ninguna manera para empoderar a las mujeres fuera de sus méritos personales, sino para garantizar que no hayan reelecciones.
"Completo" implica que cuando se revoquen mandatos, se completará el período con funcionarios suplentes del mismo sexo, y los suplentes serán los establecidos en la línea de sucesión interna.
[F] Como está probado que la gente con número de documento de identidad impar, vota igual que los de número par, con el fin de economizar, los municipios más poblados pueden decidir que en las consultas internas apenas vote un 10% de los electores [eligiendo por sorteo pocos días antes a un número del 0 al 9 para que quienes tengan esa terminación en sus D.N.I. voten representando a toda la comunidad]. Esto obviamente ya dificulta las prácticas clientelistas.
La obligatoriedad del sufragio es una decisión autónoma de cada municipio y departamento, pero, es parcial pues no se le puede prohibir votar a alguien ajeno a un Departamento de Estado en sus internas.
Cada ciudadano tiene derecho a un voto y, por ejemplo un camionero, tiene derecho a votar al Director o Ministro de Transporte, pero, puede no hacerlo por tener a un hijo enfermo y preferir usar su único voto eligiendo al Director de la Salud Pública. En la convocatoria para elecciones debe definirse si en esta se podrán emitir uno o dos votos por persona, volviendo al ejemplo anterior: un camionero con un hijo enfermo puede actuar como delegado y votar por los dos.
[G] Las leyes son decisiones institucionales obligatorias para la sociedad que se registran en libros y los jueces son los encargados de hacer que se cumplan. La ley sin los jueces no funciona, pero, como el sistema electoral en vez de estar escrito en libros por legisladores, estará escrito por programadores en computadoras, a diferencia de los libros estas máquinas pueden ejecutar las órdenes que se les dan, entonces al sistema electoral le sobrarán los jueces. Los abogados y los ingenieros y analistas de sistemas informáticos tienen el mismo nivel terciario. Un juez es un abogado al que se le dió autoridad, y para el caso novedoso del sistema electoral electrónico, se le dará autoridad a otro tipo de profesionales descartando a los arcaicos jueces, legos en esta materia.
Los legisladores pueden modificar las leyes electorales y los programadores deberán obedecerles, pero, las reformas regirán en el próximo período en el que los reformadores no tendrán participación.
[H] Para elecciones de cualquier tipo de funcionarios en donde compitan varios candidatos, siempre se agregará en primer término a la opción "ninguno" para que esos votos vayan para un candidato del pueblo elegido por sorteo.
En los plebiscitos con múltiples opciones, la opción N°1 será siempre "no innovar". La opuesta "cambiar todo" se prohibe debiéndose especificar lo que se cambia, prohibe, o agrega.
[I] El sistema electoral permitirá el voto por la revocatoria que estará siempre abierto y publicado con sus porcentajes de descontentos con cada rama de la administración pública.
[J] Quien compre "urnas electrónicas" no podrá hacerlo nunca para toda la Nación, y si se hacen compras municipales estas máquinas tras ser utilizadas deberán ser donadas al I.N.D.E.C. para que las evalúe y utilice si se las necesita en otro lugar mientras el comprador no las necesite.

3] Comentario A: En todas las áreas en las que haya que elegir funcionarios o conocer la opinión de la ciudadanía, será el I.N.D.E.C. el encargado de realizar la elección por tener a los profesionales en informática y estadísticas necesarios para instrumentar un sistema compatible con la tecnología informática y de comunicaciones instalada en el país, absorbiendo funciones e infraestructura del Ministerio del Interior [un ministerio que desaparecerá], más las áreas que le sean indispensables del Ministerio de Economía, todo el Registro Nacional de las Personas, más toda la Lotería Nacional que pasará a ser un ente autónomo dentro de un Departamento de Estado autónomo.
Así como la justicia electoral convoca a docentes como autoridades de mesa, el INDEC, puede "reclutar" a las computadoras de los correos, comisarias, loterías, etc. para realizar elecciones, plebiscitos, etc. en forma rápida y casi gratuita porque ya tenemos el hardware necesario instalado en el país.
El ahorro será multimillonario en cada elección nacional, y además se ahorra al enviar a los jueces a resolver delitos en vez de perder el tiempo en archivar las inscripciones de 500 partidos cuando sólo el 1% tiene chances serias, además, ser democrático no implica despilfarrar dinero y el sistema informatizado permite inscribir gratis a un número todavía mayor. Las máquinas de los correos, policías y hasta las de Lotería Nacional ya están amortizadas y superan los requisitos para tener un sistema a prueba de fraudes.
Las constituciones originales hechas en el siglo XIX, sólo conocían al papel, las firmas y los sellos. En cambio el comienzo del siglo XXI ofrece tal variedad de soportes que es díficil predecir cuál se impondrá como el más confiable, y lo más sensato es que cada Departamento de Estado elija el suyo pero después de establecer una forma de interconexión perfecta con los sistemas de los otros departamentos involucrados, como la Auditoría, Estadísticas y Censos, el Registro Nacional de las Personas, y lejanamente la Justicia porque al no haber que elegir ente políticos sino entre profesionales, difícilmente existan los intentos de fraudes pues estos deben involucrar a muchas personas mientras que en una competencia entre profesionales ellos estarán solos con sus propuestas y antecedentes profesionales.

Comentario B: Las autoridades militares también serán electivas, y precisamente en el caso de una guerra cuya evolución no sea la esperada, una elección sería la salida ideal para cambiar conductores sin tener un contraproducente motín [Alemania tuvo cientos en la primera guerra mundial, y así le fue]. Por esto las mismas autoridades militares en tiempos de paz deberán prever el sistema electoral en tiempos de guerra, para por lo menos tener una elección "inter cúpulas" sin derramamiento de sangre propia.
De milagro el mundo no tuvo una guerra nuclear en octubre del 62 cuando las autoridades militares de U.S.A. juzgaron como incompetente a la conducción militar de J. F. Kennedy y por su cuenta la fuerza aérea trataba de provocar a los militares de la desaparecida U.R.S.S., y la armada casi cañonea a un carguero ruso durante el bloqueo a Cuba.
Durante una guerra, o durante una ocupación, los Departamentos de Estado, los sindicatos, y cada asociación civil, pueden instrumentar lo que crean necesario para perjudicar al enemigo, de forma que si fracasan caigan solos sin perjudicar al resto de las organizaciones, por lo que la multidemocracia nos seguirá sirviendo, excepto por el área específicamente militar que es por naturaleza verticalista y no democrática, cometiendo un error histórico, pues las órdenes pueden ser verticales e incuestionables, pero las decisiones no tienen por que serlo, y mientras dos cabezas piensen más que una, la dirección de las guerras le corresponderá prudentemente a cuerpos colegiados tomando decisiones democráticamente, y que razonablemente los mismos militares decidan integrar a estos organismos colegiados con 200 personas en tiempos de paz, entrenamiento, y preparación, y con 20 personas durante una guerra [la marina de U.S.A. afirmó que durante toda la segunda guerra mundial no hubo nada que no hubiera sido ensayado previamente en sus "juegos de guerra": y algo de razón hay en ello, pero obviamente la marina miente pues Pearl Harbor y justo seis meses después la batalla de Midway son una suma de disparates cometidos por ambos bandos, en donde los únicos que no se equivocan son los criptólogos encargados de escuchar y descifrar los mensajes enemigos, y de hecho estos muchachos que no eran militares, previeron el ataque sorpresa de Japón a Pearl Harbor, pero los ignoraron, o no, porque los portaaviones de U.S.A. no estaban en la bahía en donde se suponía que debían estar para esa fecha]. El factor suerte existe, no nos olvidemos de las bombas que rebotaron en los barcos ingleses sin explotar durante la guerra de Malvinas.
Argentina sólo tiene tres hipótesis de conflicto: dos internas y una externa contra Inglaterra [si es que volvemos a tener ganas de perder]. Las internas son sobre un potencial crecimiento sostenido del narcotráfico que llegue a niveles como los que padeció Colombia, más el intento neoabsolutista del peronismo de retornar a la partidocracia controlada por ellos para lo que cuenta entre un 25% y el 33% de la población extrapolable a tener el mismo porcentaje de peronistas dentro de las fuerzas armadas, con el antecedente de que el fundador del peronismo fue un militar, y de que fueron capaces de matarse entre ellos.

Comentario C: Si por ejemplo un japonés premio Nobel de medicina gana el concurso para ser Director de Salud Pública y después de desata una epidemia, el Directorado [ex-gabinete] debe reunirse para nombrar presidente a alguien que puede no saber hablar en castellano, sino que es una eminencia en epidemias, y va a ser más eficiente y hasta va a ser un honor tener un gabinete "internacional" colmado de funcionarios notables internacionales.

Comentario D: La maniobra de traer a extranjeros para votar por poco dinero y torcer elecciones nacionales carece de sentido porque las principales áreas de gobierno son los Departamentos de Estado no politizables. En el peor de los casos alguien podría traer trabajadores extranjeros cercanos a la frontera porque al trabajar aquí ya tienen derecho a votar, pero, ¿ cuántos habría que traer para dar vuelta un sólo item ? [tal vez una elección entre ingenieros, porque son muy pocos]. Cuando llegue el día en el que dos ingenieros en pugna por el cargo de Director del Departamento de Estado de Obras Públicas, atraigan a la opinión pública de manera que los docentes, médicos, etc. consideren importante votar a uno de ellos en vez de votar por algún candidato del sector de su profesión, alguien podría considerar el ponerse a importar votantes, pero, la presidencia del Directorado que es apenas ceremonial fuera de su roll como jefe de auditores, probablemente nunca salga [excepto durante una crisis] de los candidatos de Economía o Trabajo, sustentados en su mayor captación de votos, y siendo el I.N.D.E.C. un Departamento de Estado, cuyo Director participa del "cónclave" que elige al Presidente entre todos los Directores electos, puede interponer su derecho de veto ante el ascenso de ese tipo de ganadores sospechosamente populares en zonas fronterizas.
Lo más probale sería que esta trampa se haga para ganar intendencias fronterizas, pero, para eso se tercerizan las elecciones en un I.N.D.E.C. despolitizado.
Los turistas que llegan al país para gastar aquí sus ahorros, deben querer al país y deben estar interesados en que nos vaya bien, luego, su opinión es válida, y no ha sido comprada sino que por el contrario han pagado por tener ese merecido derecho.

Comentario E: El voto en la multidemocracia es "autocalificado", opuesto al voto calificado y antidemocrático: si hay de optar entre un puente o un túnel subfluvial, quienes no sean ingenieros se autoabstendrán de votar, pero, sería ridículo intentar unir dos ciudades negándoles emitir su opinión a los pobladores de las mismas porque no hayan estudiado ingeniería.
En cualquier situación y con cualquier sistema electoral que se use para recibir la opinión de los ciudadanos, hay que descartar toda intención de fraude excepto cuando hay intereses económicos en juego, así habrían elecciones "L" limpias, y elecciones "E" económicas, que requerirán gastos adicionales en seguridad, además de los que ambas deberán tener por el siempre latente vandalismo que también existen en el área informática [que por ejemplo Lotería Nacional tiene perfectamente controlados poque sólo se puede entrar a su red con tarjetas y no de computadora a computadora].
Si Lotería Nacional recibe a diario en su red de terminales conectadas por radio [y no por Internet] a miles de opiniones acerca de qué números saldrán sorteados [opiniones que llamamos "apuestas"], también puede recibir la opinión de qué funcionarios, leyes, o proyectos desea la ciudadanía.
De esta manera los docentes elegirán entre los dos candidatos para Director de Educación, y en la misma elección los trabajadores podrán elegir entre los dos candidatos para el Departamento de Trabajo, o viceversa, puesto que los docentes son trabajadores, y los trabajadores tienen hijos que estudian y por ello puede convenirles el opinar en esta cuestión.
Al final los votos no sólo definen al electo de cada dupla departamental, sino que alguno será el que obtenga la mayor cantidad de votos y por lo tanto obtendrá la presidencia, y que presumiblemente recaerá en el candidato de "Trabajo" por haber mayoría de trabajadores, lo que no está mal, y es un hecho que ya se debería haber aceptado directamente, en vez de tener hiper indirectamente a un partido político hegemónico que antiguamente era de los trabajadores y hoy esta controlado por políticos que no trabajan [generalmente abogados].
Los sorteos son más baratos que las millonarias campañas proselitistas, son 100% igualitarios y más democráticos que votar congresistas preseleccionados y empaquetados en listas que no admiten tachaduras.
Similares a los viejos sorteos para el servicio militar, los legisladores municipales se elegirían hasta por cinco años, excluyendo a los profesionales universitarios que participan en los congresos de cada Departamento de Estado, y en ellos también democráticamente una cámara se elegirá por sorteo entre los profesionales recibidos, y otra cámara electa por concurso interno será la "mesa chica", más elástica y funcional sin "politiquerías".
No podemos ignorar que al ciudadano no le interesa que tan bien o mal use un cirujano un bisturí, si no va a operar sino administrar, por eso importa más saber si entiende a la salud como un derecho social o apenas una forma de lucrar y venderle productos comerciales a consumidores cautivos. Es imposible que un colegio profesional sea todo de una misma ideología, siendo más probable que se repartan de forma similar a los promedios del resto de la población. Por eso podemos confiar en que los sistemas electorales de los Departamentos de Estado sean más proporcionales que el sistema actual [por ejemplo el presidente Kirchner con sólo el 22% de los votos ganó el 100% del Poder Ejecutivo], y además, siempre se tiene el derecho de revocatoria.
Dentro de las corporaciones como los colegios profesionales, es lógico hacer elecciones pues entre ellos se conocen, pero, a nivel nacional el 99% de los afiliados de un partido sólo conoce a los pocos de los que encabezan las listas por verlos un par de minutos en televisión, donde el candidato actúa según lo que sus asesores de imagen le sugieren atendiendo a la composición del público de cada programa.
El sufragio jamás llevó al Congreso a un "Mozart" de las leyes que ante un problema detecte automáticamente su origen y redacte la ley que lo solucione sin tener que discutir con todos porque, su lógica, no admite otra cosa que la admiración.
Todos aprenden el oficio de "mediador de conflictos a sueldo" en el Congreso, aprendizaje que pagamos nosotros y del que nadie rendirá examen al final del curso mientras que, con sorteos, tendríamos 50% de chances de que entre gente inteligente y, obvio, un 50% de pocas luces o, desde otro ángulo, un 50% de gente buena y un 50% de gente despreciable [muy preferible al 100% de políticos profesionales que tenemos hoy] y seguramente con el tiempo se crearán clubes de ex-congresistas por especialidades como derecho constitucional, prevención del delito, etc., para orientar gratuitamente a los congresistas nuevos.
Para que el sistema sea considerado democrático, la representación debe estar basada en una decisión libre del cuerpo electoral que de decidir "señores dirigentes de los partidos políticos, preseleccionen ustedes a los integrantes de las listas de candidatos para que nosotros únicamente tengamos que optar entre una u otra de ellas", deberá pasar a "no delegamos más la preselección de candidatos en nadie y sortearemos a nuestros representantes, sin ninguna intermediación" y entonces habrá nacido un conflicto entre el pueblo y el grupo al que le gusta darle órdenes a los demás, y encima se lo facturan.
Claro que sortear es justo y democrático pero puede resultar electo un imbécil, entonces, no queremos una aristocracia, pero, igual queremos que nos gobiernen los mejores y eso nos lleva a tener una aristocracia "abierta" con acceso gratuito a la educación [algo defendido desde las derechas hasta las izquierdas, pero que no defiende esta constitución, a favor de dejar de mentir sobre gratuidad y proponer una mucho mejor financiación perfecta del estudio].
En el peor de los casos habrá que conformarse con imbéciles integrando gobiernos pues son los menos capacitados para robar, y pueden ser capacitados para lo que el Estado espera de ellos. En cambio, a los corruptos no se los puede hacer decentes.
Pese a este detalle, el sistema de urnas electrónicas ya amortizadas de la Lotería Nacional y el recurso de sortear congresistas es enormemente económico [y hasta ahora todo cambio institucional o de políticas siempre resultaron ser muy caros, en gran parte por los retornos y los negociados turbios con testaferros del poder], para la técnica legal puede parecer impropio o prosaico que una constitución se fije en detalles de ahorro de dinero que podrían considerase cuestiones domésticas menores, y si esta ley da instrucciones de cómo encontrar recursos gratuitos o ya amortizados, lo hace porque pocas o ninguna constitución democrática del mundo se ha preocupado por la logística electoral, y así les va: todas son poco más que ficciones. Sin este detalle logístico solucionado toda esta ley primera no sería más que utópica, y cualquier crítica que la califique de ser utópica miente como mienten todos los políticos y mienten todas las constituciones del mundo donde el poder real no está en la ley escrita ni en las autoridades formales votadas, sino en el lado oculto del poder: el poder económico.

Comentario F: En consultas complejas, estadísticamente el resultado tendrá un margen de error mínimo contra un ahorro gigante, y el voto sin discriminar a nadie [mujeres, esclavos, etc.] igual es "universal".
Incluso podría reducirse la cantidad de votantes mucho más. Así el voto no es ni un derecho, ni una obligación, sino el "trabajo temporario" de leer y opinar, cobrando [por ejemplo] $ 1.000 al contado y en el acto. Esas 10.000 personas sorteadas cobran por perder medio día de trabajo, o descanso, para hacerse presentes en donde votar [comisarías con una computadora en red, correos, y agencias de Lotería], después de recibir en su domicilio una carpeta oficial con los proyectos y opciones que requieran de su opinión. No es lo mismo estar obligado a votar junto a otros 10 millones de personas, que ser uno de los 10.000 elegidos tal vez por única vez en la vida, lo que será una responsabilidad social que va a conmover a quien le toque. Nadie lo tomará a la ligera, algunos leerán y decidirán en soledad, otros lo debatirán con la familia, otros buscarán la opinión de quienes más respeten, como sea: se va a saber qué es lo que quiere la gente, y no lo que quieren o les conviene a sus dirigentes políticos.
Podrán hacerse hasta tres votos por persona porque los médicos e ingenieros votan en sus áreas pero también son trabajadores y pueden tener emprendimientos comerciales y por eso les correspondería votar en economía. Probablemente la mayoría de los votos sean capturados por los candidatos de los departamentos de Trabajo o de Economía, monopolizando entre ellos la presidencia del Directorado [tal como en el viejo sistema presidencial lo monopolizaron los abogados], y para evitar que esto se repita elección tras elección, la convocatoria a elecciones para las que en principio debe ser obligatorio un voto por persona, podrá ampliarse a dos o tres votos por persona: una en donde predeciblemente cada uno votará a un candidato del binomio del Departamento con el que su profesión lo vincule, pero si se comprueba que se ha monopolizando la presidencia en manos del Director del Departamento de Trabajo, o el de Economía, si pase lo que pase siempre van a ganar ellos, entonces no sería democrático dejar a multitudes afuera de tener que tomar una decisión votando en dichos Departamentos de Estado, aunque la presidencia sea una formalidad que carece de la omnipresencia monárquica del presidencialismo previo y, en última instancia ya se habría cambiado el estatus del trabajador al pasar la Nación de ser una República de ciudadanos, a ser una República de trabajadores.

Comentario G: ¿ Tener jueces para vigilar a quién, e incluso, quien vigilaría a los jueces ?
Quien cometa fraude en el siglo XXI es un asno atrasado ya que nadie elige nada que expertos en marketing y publicidad ya no hayan elegido y preparado para hacernos creer que debemos tomar una importante decisión entre opciones que son como el día y la noche, pero que terminan siendo iguales.
El "poder" nunca comete fraude y aporta por igual a las campañas de los principales candidatos [quienes posiblemente cometan fraude con el único fin de convertirse en sus títeres], o sea: por elecciones, tomando exámenes, tirando la moneda, de lo que hablamos es de a quién se le permitirá llenarse los bolsillos trabajando de títeres de los poderosos.
Cuando en una elección hay un candidato del mercado, lo es de algunas corporaciones [como las que están a favor de aplicarles retenciones a otro grupo económico] en conflicto económico y no ideológico con otras fuerzas del mercado que sólo para una mente limitada puede concebirse como un bloque monolítico a los que los políticos "enfrentan".
Esto quiere decir que los candidatos son iguales en tanto "títeres", y diferentes en tanto reciben apoyo de diferentes grupos de presión de un mismo mercado que está en guerra interna siempre e, incluso cuando se enfrentan dos posiciones opuestas como socialismo y liberalismo, hay sectores del mercado que se benefician con el socialismo [siempre alguien se beneficia y todos estamos en los mercados, o como consumidores, o como fuerza laboral, o como capitalistas], bien, la ciudadanía no entiende el juego, pero, los candidatos sí y salen a vender sus servicios: es la ley de la oferta y la demanda, y no una ley de la democracia la que dirige sus acciones.
Esto comienza en las "internas", tristes concursos de bajezas peores a las que se usan en las elecciones generales, que forjan odios y divisiones exclusivamente por ambiciones personales ya que no hay causas ideológicas, o lo correcto sería cambiar de partido o fundar uno nuevo en vez de gastar dinero en elecciones a las que por suerte cada vez menos se dejaban arriar [el peronismo kirchnerista las convirtió en obligatorias para disimular su ocaso].
La existencia de algunos políticos decentes no lava los pecados del sistema que ha evolucionado para beneficiar a una casta parásita, por eso, después de igualar a hombres y mujeres en sus posibilidades para llegar al gobierno, debemos igualar la de todos los ciudadanos en general estén o no afiliados y eso, no se logra con elecciones, sino con sorteos en algunos casos y con concursos en otros, y con un insensible programa que a su vez no tiene ideología, ni simpatías, ni es sobormable, ni cobra ningún sueldo que será pagado por los políticos que debe vigilar.

Comentario H: Un sistema electoral informatizado publica todo en Internet, y además envía notificaciones a los medios de comunicación para que publiciten los llamados a elecciones que están programados para una fecha inalterable a los manejos de los políticos de turno.
El programa permitirá candidatearse sin pasar por jueces ni burócratas.
Nos quedamos afuera de la revolución informática del hardware y del software, pero, podríamos ser la primera nación en tener una institución vital de gobierno sin sede física [o sea sin un edificio gigante como el del Congreso, el Banco Central o el Palacio de Tribunales], sin oficinas, ni burocracia, ni papeleos, ni firmas, ni sellos, simplemente el sistema se activa en determinadas fechas, la gente vota, el sistema cuenta los votos, informa el resultado, y envía los fax-diplomas a los ganadores congresistas, intendentes, gobernadores, etc.
Los profesionales de la informática desplazarán a los profesionales del derecho [todos con igualmente válidos títulos terciarios] y como por más vueltas que se le de al asunto contar votos y repartir cargos proporcionalmente es una cuestión matemática, un programa de computación podrá reemplazar a los jueces, como los semáforos reemplazaron a los polícias y las garitas de tránsito.
Las leyes están escritas en una jerga legal y el sistema electoral estará en lenguaje de computadoras, como el himno está escrito en un pentagrama, distintas formas de registrar las cosas en las que estamos todos de acuerdo y, lógicamente, los músicos leerán los pentagramas, los jueces leerán las leyes y los programadores se encargarán del sistema electoral nacional.
El organismo que deba tener elecciones estará obligado a entrar al programa y registrarse anotando los cargos electivos, y la duración de sus mandatos.
En el caso de no cumplir con lo que el programa les exige, sí se podrá recurrir a la justicia por incumplimiento de los deberes de funcionario público, sin necesidad de tener una justicia electoral permanente cuando se vota una vez cada dos años.

Comentario I: La revocatoria pone a la defensiva a quienes detentan el poder al punto de poner a la Nación al borde de una guerra civil. De esta forma se gobernará sabiendo lo que resta para destituir a los funcionarios en el poder, sin necesidad de que el oficialismo gaste nuestro dinero en consultoras, ni que la oposición haga costosas campañas que no van a ser contestadas caballerosamente sino tratando de enfrentar a la gente para evitar tener que pasar por el filtro de esta opción democrática.

Comentario J: Las tecnologías hoy existentes confiables hasta para comprar acciones por Internet, permiten hacer un sistema de consulta rápido y a prueba de fraudes, e incluso evitando que se cometan negocios turbios al comprar las máquinas o el software del nuevo sistema.
Las máquinas de Lotería Nacional son pequeñas computadoras conectadas en red por satélite [por afuera de Internet] invulnerables a los "hackers".
En vez de instalar un sistema nuevo, es mejor ampliar este sistema llevando esas máquinas hasta las localidades lejanas, entre otras cosas porque la gente ya sabe usarlas y porque estas máquinas se autofinancian con el juego [los habitantes alejados de los centros urbanos, deberán acercarse a un correo, comisaría, o hasta a una estación de servicio].
Para las elecciones en donde se presentan a votar millones, otro "juego" más se le agregaría a los conocidos Loto, Quini-6, Quiniela y etc. ya que las máquinas tienen espacios libres para agregarle futuros juegos y, si se pueden jugar los números del 00 al 99 de la Quiniela, se puede hacer cualquier plebiscito desde votar por "sí" o por "no" y hasta 100 partidos, candidatos, propuestas, y hasta multiples choices o asignar prioridades entre varias medidas de gobierno, etc.
En U.S.A. acusaron a las personas mayores judías de no saber votar al punto de elegir a un antisemita, pues bien, aquí no va a pasar ya que todos los días la gente de todas las edades apuesta sin ninguna dificultad.
No hay que gastar fortunas en imprimir padrones y ni siquiera hay que suspender los sorteos diarios, ya que el agenciero puede introducir una tarjeta con el N° de un D.N.I. duplicado pero el software del sistema en el centro que recoge los datos, filtrará los números repetidos [o de fallecidos] y a los que con el mismo D.N.I. decidan ir a votar a doce agencias distintas sólo les tomará por válido el último voto, posibilidad que antes no existía y que contempla los inevitables errores o arrepentimientos, e igual que con el Loto se podrá votar de lunes a viernes y el domingo se sabrá quién es el ganador sin errores.
El costo de las elecciones se paga en persona. Para ahorrar el gasto en movilizarse, el votante puede elegir en dónde hacerlo, y el programa le asignará el voto en su distrito electoral.
Los agencieros de Lotería Nacional tienen habilitación para recibir dinero, y en los correos y comisarías se pondrán urnas gratuitas.
Como el costo en papel de boletas membretado es mínimo, cada votante puede pagar $0,50 al votar [en vez de pagar $6 por intermedio de los funcionarios de gobierno] y cubrir todos los gastos de la elección, además el hecho de pagar disuade a los votadores múltiples.
Los fiscales no reciben los costosos padrones y sólo darán fe del correcto trabajo del agenciero.
Al votar el agenciero recibe cualquier Documento de Identidad, ingresa el número y tipo de documento, y luego imprime una boleta en blanco con ese número dos veces: una decimal para que lo verifique el votante y los fiscales, y otra digital en barras o en puntos de seguridad.
Esta boleta será llenada por el votante usando una "máscara" diseñada para cada elección que tendrá perforaciones donde el votante marcará, una vez llenadas las opciones se le devuelve la boleta llena de "cruces" al agenciero [sin la máscara].
El agenciero la reintroduce en la máquina que enviará esos datos al centro de cómputos, y luego se la devolverá al votante asegurando que el voto se mantenga secreto [pues podría usar una máscara para leer los votos].
El agenciero puede ser el de confianza del votante [el cercano a su domicilio o a su lugar de trabajo] y para el caso de personas no videntes o de muy mala vista, el agenciero o cualquier fiscal recibe del votante una máscara para leerle las opciones y llenarlas por él, mientras el resto de los votantes espera afuera del local.
No hace falta sellar los documentos y hasta se puede votar con la Cédula de Identidad porque el software ubica en su base de datos a que D.N.I. corresponde para evitar que se vote con dos tipos de documentos distintos [y las cédulas están plastificadas].
La boleta queda en manos del votante incluso las que tengan errores que hayan obligado a hacerlas dos veces.
Se podrá votar de lunes a viernes, y conocer el resultado el domingo.
El programa impide los votos nulos y da la opción de voto en blanco "positivo": esos votos suman para un candidato desconocido y no partidario, sorteado entre los que se presentaron a votar, el voto en blanco [20% en la elección del 14/10/2001 al 1% en la del 27/04/2003] deja de ser desperdiciado y obtiene un sentido, evitando situaciones como la de los cacerolazos, semianarquía y saqueos dos meses después de una elección nacional.
Las máquinas no pueden ser sino de dos tipos: las que reciben el voto de los votantes, y las que reciben los datos que esas máquinas les envíen para hacer las sumas de votos. El I.N.D.E.C. tiene al segundo tipo de máquinas operativo, y la Lotería Nacional tiene a las del primer tipo utilizándolas para recibir apuestas de números [y las listas o los candidatos pueden ser denominados con números].