1] Introducción: Disciplina quiere decir que la opinión de un legislador ni siquiera es respetada dentro de su propio partido, aunque lo más probable es que estos no tengan ninguna opinión hasta que les ordenen lo que deben decir y hacer. Hacia "abajo" es igual y por eso no tenemos funcionarios públicos sino partidarios sirviendo primero o exclusivamente a los intereses de su partido antes que a los del ciudadano común.
Quienes se autosometan a ella están diciéndole a todos que ya no están allí representando al pueblo, sino por el excelente sueldo y otras ventajas que no piensan dilapidar por los derechos de unos pocos coprovincianos que mañana no recordarán nada, y sólo es peor que el dejarse manipular como títeres, el hecho de ponerse a argumentar en favor de la disciplina partidaria: una divisoria de aguas entre quienes se someten para "acomodarse" en algún nicho del poder, y quienes lo ejercen con puño de hierro.
Al aumentar la población, la democracia directa se hizo técnicamente imposible, porque millones de ciudadanos no se pueden poner a discutir ordenadamente ningún tema, por eso se recurrió a la democracia representativa en donde un grupo mucho más chico puede hacer el intento de enterderse.
Hay varias definiciones para "democracia", desde técnicas hasta líricas, pero, no puede dejarse de lado que antes que nada se trata de un orden que se establece sobre parámetros morales, y la disciplina partidaria impuso un orden verticalista en el límite entre la democracia legal y el autoritarismo formal. Cuando se la inventó o elucubró, de los cientos de opiniones diversas apenas quedaron dos, y entonces no hizo falta entenderse porque una se impondrá a la otra, no por la razón, sino por superioridad numérica [por ejemplo, los casos de bancas usurpadas en el Senado, donde la mayoría "disciplinada" aprobó un fraude]. Así funcionó nuestra democracia sin que el país se haya indignado ante tal corrupción, por la "bocariverización" de la política: lo que haga su equipo aunque esté mal, siempre que sea para perjudicar al otro, será válido y defendido como sea.
Así es como la labor parlamentaria dejó de ser un trabajo en equipo para ser un campo de batalla en el que no se le concede absolutamente nada al adversario.
Nuestro sistema está con la mayoría y no con los proyectos más inteligentes: se gana por la fuerza del número y punto, lo que obviamente bloquea a las iniciativas individuales.

2] Artículo 32 [esbozos previos]: Dentro de las atribuciones de sus cargos, los funcionarios tendrán una responsabilidad indelegable, y las "cadenas de mandos", como sea que se impongan en la práctica, son entendibles en un campo de batalla, en un quirófano, al combatir un incendio, o hasta dentro de una familia, pero no lo son para la democracia donde el único con mando es el pueblo cuando vota. El funcionario que no actúe libremente sino subordinándose ante las órdenes de otro por "obediencia debida", traiciona a su pueblo.
[A] El nepotismo demostró ser el mejor cemento de toda estructura corrupta sólida, pero, los funcionarios deben delegar funciones en personas confiables, entendiéndoselo como suma de pericia más obediencia. Así, los funcionarios sorteados o concursados tendrán derecho a rodearse con un número limitado de nepotes "ad-honorem" elegidos entre sus familiares y amigos, asumiendo la responsabilidad por las negligencias o delitos que estos cometan.
[B] El Presidente tiene prohibido ausentarse de la sede de gobierno durante toda su gestión. Para asuntos oficiales internacionales están el Canciller y los embajadores, y para asuntos internos no habrá un "Ministro del Interior" sino varias oficinas de Enlace y/o Mediación, como centros físicos de operaciones de los nepotes nombrados por la Presidencia y cada Departamento de Estado, siempre sin personal a cargo. Las tareas de estos funcionarios serán la de ser consejeros pero también la de ser los negociadores en nombre de su jefe. La cantidad de nepotes es decidida libremente pero con un límite, pudiendo ir de cero a seis activos, porque al cambiar los temas en las agendas de los funcionarios puede ser necesario cambiar de asesores.

3] Comentario A: No termino de entender qué hace el Presidente en la inauguración de nada. Estas deberían ser una fiesta para los que trabajaron allí: desde el director de la obra hasta los peones.
La cortesía lógica y el orgullo por exhibir el logro del trabajo terminado, debe ser atendido con un agradecimiento presidencial entregado en mano por un "nepote" hermano, esposa, hijo, etc., pues nadie duda lo importante que es un hijo para su padre, y al mismo tiempo no tenemos al presidente de viaje por todos lados.

Comentario B: Las funciones de los nepotes van desde las sociales, hasta la de emisarios internos, mediadores en conflictos de poder, presentadores y defensores de los proyectos presidenciales ante algún Congreso y sus comisiones internas, interventores de instituciones de gobierno en casos de emergencia, veedores de asuntos temporales como las campañas para recaudar fondos para las víctimas de catástrofes, pues cualquier irregularidad va a salpicar al gobierno y a su cabeza.
Un Presidente o Director de Departamento de Estado puede poner como nepotes a asesores que no sean parientes o amigos, y sin tener que rendirle cuentas a nadie podrá pagarles un salario de su bolsillo, dejando se der "ad-honorem", lo que sí siempre deberá ser informado.
El Presidente podrá destituir pero no reemplazar a nepotes de ajenos, "a sola firma" y sin apelación. Obviamente un nepote va a actuar de forma similar a la clausurada disciplina partidaria, pero, un conflicto o cualquier problema causado por un nepote no puede durar más de 24 horas y escalar hasta ser un problema de Estado.
Habrán funcionarios con mayor participación de sus familias mientras que otros no los querrán ni ver dirigiendo el tránsito, al Estado no le cuestan nada y psicológicamente es comprensible que un funcionario vital del Estado trabaje mejor rodeado de sus afectos, y también lo es que sus afectos al no cobrar un sueldo sean resolutivos, expeditos, para dejar atrás rápido a la función pública, obtener una medalla en reconocimiento por su servicio desinteresado, y volver a dedicarse a sus cosas.
Los nepotes serán algo como nuestra "familia real", y nuestro nepote más famoso en su momento [más que los hijos de De la Rúa] fue el hermano de Evita que terminó siendo el primer "suicidado" peronista. Sin llegar a esa forma de terminar un mandato, los tribunales de ética de todos los Departamentos pueden emitir amonestaciones hacia cualquier nepote, y una avalancha de estos contra un nepote presidencial podrá marcarle el camino de salida a su mentor, si éste resultase muy dolido de verse forzado a tener que pedirle la renuncia a alguien de sus mayores afectos, y me refiero a nepotes groseros o ignorantes que den una mala imagen del gobierno, y no a nepotes que sean los amantes gay de un presidente que le estuvo ocultando a sus votantes de cuál club era socio... porque algún día esto va a pasar, y es mejor saber resolver esto antes de que la presidencia de la Nación se convierta en el centro de las burlas de todos, pues reírse del poder es más natural que aceptarle a otro cómo y con quién se le antoje fornicar, porque el tema aquí no es no cómo ni con quién, sino "dónde" y "cuándo": en nuestra Casa de Gobierno, y mientras le estamos pagando su sueldo.

Comentario C: En todos los países y épocas se puede constatar el veloz envejecimiento y debacle física que padecen los altos mandatarios, luego... ¿ cuánto debe durar un mandato, cuántas hora debe trabajar por día, cuántos días por semana, y cuántos meses por año ?
En una multidemocracia como la que propongo cada Departamento de Estado decide cuánto tiempo dura alguien en su presidencia, y ellos incluso pueden decidir si harán concursos, contrataciones, o elecciones, pero, con en este último método el sistema prohibe las reelecciones. De modo que el Departamento de Obras Públicas puede contratar a un ingeniero canadiense y como no es electo por el voto popular, ellos pueden mantenerlo en el cargo por 20 años hasta que éste decida retirarse y se jubile.
El problema que no es un problema sino una anomalía, es que si hay una catástrofe natural como un volcán en erupción cuyo derrame de lava amenace a un pueblo requiriéndose que de forma rápida todos los recursos del Estado se destinen a hacer zanjones o barreras de contención, pues nuestro gabinete está obligado a solicitarle al Presidente en ejercicio que renuncie para que asuma el Director de Obras Públicas y, obviamente hasta que se termine la crisis, tendremos a un presidente canadiense. La crisis puede ser la de provincias inundadas, una epidemia de fiebre hemorrágica desconocida sin cura, o una invasión de abejas asesinas, el tema aquí no es la nacionalidad del presidente temporal sino cómo se entiende lo temporal, pues los Directores de Estado tienen jornadas laborales de ocho horas, descanso los fines de semana, más vacaciones, mientras que un Presidente lo es las 24 horas del día.
Creo que un Presidente venga del Departamento de Estado que venga, debe tener un horario laboral común, e incluso debe descansar el domingo aunque la lava esté llegando a Olivos, entonces... ¿ quién gobierna cuando el presidente duerme, se toma un fin de semana largo, o se va de vacaciones ?, y la solución es que nombre a algunos de sus nepotes [sin sello ni derecho a firmar nada] y los use como "guardia rotativa" y entre todos cubran todas las horas de cada semana, y quien se quede toda la noche sentado en el sillón presidencial no va a ser un "Asesor en ejercicio de la Presidencia", sino un "Nepote de guardia", con lo que la multidemocracia no sólo tendrá un corporativismo constitucional democratizado, sino que también tendrá un nepotismo constitucional.